Junio y julio son dos meses propicios para acometer las reformas en casa. Tenemos algo más de dinero en efectivo, ya que hemos cobrado la paga extra, y con la llegada del buen tiempo pasamos menos tiempo en la vivienda, por lo que nos incomodan menos los obreros. Pero, ¿por dónde empiezo?
La cocina y el baño son las dos dependencias que más solemos renovar en las casas. Te vamos a sugerir algunos criterios para que te plantees de una forma razonada por dónde empezar. ¿Te conviene más acometer la reforma del baño y el año que viene te pones con la cocina? ¿Lo haces al revés? ¿O te planteas una reforma integral de la casa?
Una cosa importante antes de realizar una reforma es no dejarse influenciar por los amigos, ni por la familia. Uno reforma una habitación de la casa porque necesita hacerlo, o porque le apetece. No porque la vecina haya cambiado su cocina, tienes que hacer tú lo mismo. Ni tu casa es igual, ni vive la misma familia.
Con esto quiero decir, que las reformas del hogar son una cuestión muy personal. Pueden ser múltiples y variadas las razones que te lleven a plantearte una reforma: que haya menos gente viviendo en casa, que te hayas hecho mayor y la organización de la vivienda no te satisfaga o, simplemente, que estés cansado de ver el baño igual los últimos 20 años. Sea lo que sea, quien lleva la batuta en la reforma, eres tú.
Dicho esto, permíteme que te proporcione algunos datos antes de que tomes una decisión definitiva. Aquí te los dejo, para que los medites.
Reformar el baño sale más barato.
El blog del comparador de seguros acierto.com valora que reformar un baño te sale entre un 30 y un 50% más barato que reformar una cocina. Ya no solo por las dimensiones de la habitación, sino por los trabajos que se han de realizar en ella.
Los trabajos que determinan el precio de la reforma son:
- Demolición y desescombro del baño o de la cocina.
- Instalación o redistribución de suministros (Luz y agua).
- Compra de mobiliario, sanitarios y/o electrodomésticos. Este es un punto en el que el precio de la cocina se dispara con relación al baño. En el baño no vas a instalar ningún electrodoméstico, y los muebles de almacenaje son considerablemente menores en número y tamaño.
- Revestimiento de paredes y suelo. Aquí la diferencia está en cuanto a las dimensiones de la habitación.
- Instalación de un falso techo de pladur, si procede.
- Posible cambio de la puerta.
- Mano de obra.
La mano de obra es uno de los gastos más importantes en cualquier obra. Ten en cuenta que para reformar la cocina o el baño necesitaras mano de obra cualificada: fontanero, electricista, albañil, carpintero. La especialización se paga.
En el precio de la mano de obra por hora no solo se abona el sueldo neto que va a cobrar el operario en la nómina, también se incluye la cotización a la seguridad social (del trabajador y de la empresa), una pequeña parte proporcional de las pagas extra y de vacaciones, el desgaste de material, etc. Esto significa que cuanto más tiempo dure una obra, más dinero pagarás en concepto de mano de obra. La mano de obra suele representar entre un 15 y 25% del coste final de la reforma.
Un mecanismo para ahorrar dinero es negociar con la empresa un presupuesto cerrado. Una cantidad de dinero por lo que no estás dispuesto a pagar de más. Esto obligará a la empresa a acomodarse al presupuesto.
Una cocina tarda en reformarse el doble de tiempo que un baño.
Lógicamente, todo esto depende del trabajo concreto que se vaya a realizar. De todos modos, partiendo de las estadísticas que maneja el blog de bricolaje Wolly Home, una cocina se tarda en reformar entre 4 y 8 semanas. Mientras que la reforma de un baño suele durar ente 2 y 6 semanas. Se trata de datos más o menos parecidos a los que se manejan en otras páginas web.
Valorar el tiempo de duración de una reforma es importante por varias cuestiones. La primera de ellas es para evaluar el tiempo que nuestra casa va a estar ocupada por los operarios. Durante ese tiempo va a ser difícil que podamos llevar nuestro estilo de vida habitual. Determinadas rutinas que estamos acostumbrados a hacer, tendremos que prescindir de ellas. Si te están reformando la cocina, tendrás dificultades para cocinar. Si te están reformando el baño, quizás no puedas ducharte cada mañana antes de ir al trabajo.
El otro asunto en el que influye directamente la duración de la reforma es en el precio final de la obra. Como hemos dicho antes, cuanto más tiempo duren los trabajos, más pagarás en concepto de mano de obra.
La duración de la reforma viene determinada por las acciones que se realizan en ella, no por los materiales y muebles que vayas a instalar. Algunas tareas que alargan la duración de las obras son:
- El montaje y colocación de los muebles.
- Los trabajos de demolición y desescombro.
- La instalación de azulejos en las paredes y el cambio de suelo.
- Los cambios en las tuberías y conductos de la luz.
- Pintar la habitación.
- Los acabados finales.
Cuestiones a dejar claro antes de efectuar una reforma.
Hemos querido hablar con los arquitectos de Construcciones Garré, una empresa que ha llevado a cabo más de 700 obras y reformas, para aclarar algunas dudas que teníamos. Ellos nos han indicado que tanto para la reforma de un baño, la de una cocina o una reforma integral, debemos tener en cuenta 4 cuestiones:
- La experiencia de la empresa. Trabajar con una empresa experimentada es un punto que tenemos a nuestro favor. Pocas obras salen como se tenían planificado. Siempre surge algún imprevisto. Sí la empresa y los trabajadores tienen experiencia en situaciones parecidas, podrán encarar los desafíos con éxito. Buscando soluciones para que el presupuesto se dispare lo menos posible.
- Atención personalizada. La comunicación continua entre el cliente y la empresa de construcción es un aspecto clave que marca la diferencia. Si eres avispado, esto se descubre desde la primera entrevista. El director de obra debe entender que es lo que quieres hacer en casa y te debe explicar cómo lo va a hacer. Que os entendáis desde un principio es fundamental para que la reforma llegue a buen puerto. Por otro lado, la empresa de reformas te debe comunicar cada imprevisto que surja y consultar contigo las soluciones que puede aplicar, para que seas tú quien tenga la última palabra. Aunque la reforma se realice contigo en casa, es adecuado que el encargado te vaya informando sobre el avance de las obras.
- Cumplimiento de plazos. Este es un aspecto fundamental. Las obras deben terminar cuando se tenían previsto. Esta es una información de la que tienes un conocimiento relativo en el momento en que contratas a una empresa. El representante de la empresa te dirá que por supuesto van a cumplir con los plazos, pero eso lo sabes conforme se va desarrollando la obra. Lo que sí tienes que insistir es que la obra tiene un plazo de finalización.
- Compara precios. La oferta de empresas de reformas y construcción es amplia en cualquier lugar de España. No te quedes solo con una empresa. Pide información y presupuesto a varias compañías y elige la que más te satisfaga. A la hora de comparar empresas no te limites al importe del presupuesto. Debes valorar la relación calidad-precio. Quizás encuentres una empresa más económica, pero que no está dispuesta a realizar la reforma que precisas o, sencillamente, no te entiende.
Una reforma integral sale más barata.
Esta es una información que debemos relativizar. Evidentemente, si realizas la reforma del baño y de la cocina al mismo tiempo, o acometes una reforma integral, pagas más. Pero la factura final te va a salir más económica que si sumas la reforma de la cocina más la del baño. Es, por tanto, una inversión que vale la pena considerar.
Las razones de que esto sea así son fáciles de entender. Por un lado, el tiempo de obra es menor que sí reformamos las dependencias por separado. Aquí tenemos un ahorro que proviene de la reducción de la mano de obra, ya que el trabajo se hace concentrado.
Por otro lado, una empresa de reformas integrales te buscará todos los profesionales que necesites para realizar la obra. Algo que siempre te saldrá más económico que si tú tienes que buscar un fontanero, un carpintero y un albañil por separado. Tienes la ventaja, de que la empresa los va a compenetrar en función del proyecto de reforma.
Por último, y no menos importante, realizar una reforma integral siempre te da la opción de negociar un presupuesto cerrado.
Como ves, con este artículo he intentado proporcionarte información de interés. Señalarte cuestiones que debes valorar antes de plantearte la reforma. Ahora a ti te corresponde tomar la decisión.
